Es que en esta analogía del río y del mar con el internet se hace desde hace mucho tiempo, como podemos leer el río y el mar, será parecido a como leemos el internet de estos tiempos, a veces el río viene con el agua turbia por las lluvias, que también me hace pensar que Internet se vuelve turbio cuándo hay tanta violencia fascista provocada por los discursos de odio promovidos en el contexto actual por Trump, Netanyahu y demás políticos de turno alineados a esas formas de expresar la violencia, expresan lo reaccionarios, retrogrados y genocidas que son.
Río del internet, y también río de los memes realizados a los narcopolíticos de turno, así como me llenó de risas ver a la rana haciendo retroceder al ICE y las miles de ranas que tomaron las calles en el día de #NoKings en los Estados Unidos.
Río Ulúa es la memoria del lugar donde crecí, como tengo memoria de los datos que subí a los primeros blogs y que algunos datos todavía navegan en la red, como pensar en los tiempos que vivimos de cambio climático y de lo efímero de la información, de la contaminación por plástico que habita en los ríos y mares, comparado con las noticias falsas generadas por inteligencia artificial.
Río es unión no es la división o la frontera como nos lo hicieron creer los colonizadores, Río como lugar de encuentro, de placer, de pensar y disfrutar la vida. ¿Nos encontramos en el río? Si pensamos en el río más cercano y si nos hacemos las preguntas ¿qué nos dice el río? ¿Qué podemos hacer por nuestra unión con los ríos? ¿Qué recorrido tiene? ¿Dónde nace, dónde desemboca?, ¿Qué problemas le hemos provocado? ¿Qué podemos hacer como comunidad por nuestro río?
Nos colonizaron las ideas de nuestra relación con el río así como la relación que actualmente tenemos con el Internet visto como objeto de consumo, alienada la relación de cómo vive, cómo funciona, como sigue existiendo, cómo se nutre, cómo se desborda, como contaminamos y como dejamos o hacemos algo para coexistir.
Río con nombre indígena así como muchos en Abya Yala y que tal si hacemos eso con los nombres de los colonizadores que aparecen en las ciudades y que nos recuerdan que hicieron el genocidio y que por ellos las nombraron así, imagínense que en Palestina nombren a una de las ciudades más importantes Netanyahu nos parecería una aberración pero eso pasó en nuestra Abya Yala.
Por ejemplo en Honduras tenemos un departamento de Cortés que lleva el nombre del genocida español Hernán Cortés, en México esta el Paso de Cortés (Estado de México, México) y Villa de Cortés (Ciudad de México), que tal si les ponemos su nombre indígena a esas regiones habitadas por diferentes pueblos. En el caso de Honduras al departamento de Cortés le podríamos nombre Sula una palabra que en indígena esta relacionada con el agua o con el río.
Pensar en los movimientos de los pueblos, como por ejemplo cuando se realizan las acciones y encuentros en zonas que ancestralmente han sido y son para ese intercambio y memoria de la cultura, como pueblo no se perciben esas supuestas divisiones o fronteras internas, lo más importante es continuar con las prácticas, volver a la raíz de nuestros pueblos que habitan regiones bastas y que nombrarles con su nombre indígena es parte de hacer justicia.
Sin duda que si los cables submarinos de internet nos unen los ríos también, que sean nuestra excusa perfecta para conectar la mirada, el hacer en comunidad y resignificar la vida en nuestro territorio.